Un grupo de amigos voluntarios, unidos por la pasión de los carros clásicos Mini Cooper, se unieron para regalar momentos llenos de esparcimiento y alegría a los niños y mamás de nuestro hogar.

Es así cómo esta gran aventura comenzó el pasado sábado en la tarde, cuando los voluntarios arribaron a la sede de la fundación para recoger y pasear a nuestros niños y jóvenes en seis hermosos carros que los llevarían a recorrer la ciudad.

El lugar de destino fue el parque Ciudad Berna, en donde tenían preparada una actividad de integración para compartir con nuestras familias Dharma. Durante ese compartir hicieron entrega de un kit de aseo y un mug personalizado para cada uno de ellos.

Agradecemos a nuestros voluntarios y donantes del Club Mini Cooper quienes hicieron parte de esta inolvidable aventura. Cada detalle de ese día fue planeado con cariño para que nuestros niños y mamás disfrutaran de ese gran gesto de solidaridad y bondad que desbordó de alegría los corazones de todos los presentes.